Recuerdo
que cuando era un niño, las primeras novelas que leí, estaban ubicadas en las
bibliotecas familiares. Esas bibliotecas estaban compuestas en gran parte, de
literatura clásica. Quizás de esas lecturas impetuosas y largas, desprenda mis
gustos por los autores cuyas biografías están escritas en los libros de historia.
Hoy compro libros, guiado justamente por esos gustos que adquirí de niño.
“Los
Geniecillos Dominicales”, llegó a mi vida, así, gracias a la colección de
novela peruana de “El Comercio”, adquirida por un tío mío. Consta de 24 capítulos.
En el 2016 “Bizarro Ediciones”, publicó una nueva edición de esta novela, por lo
que hoy pueden encontrarla con mayor facilidad.
Esta
novela cuenta las vivencias libertinas de un estudiante de derecho con vocación
de escritor. El conflicto en el que se encuentra el protagonista, esta entre
sus deseos de superación y su actitud irresponsable. Por momentos desea ser el
mejor abogado de su generación, deseos que son olvidados al levantar un vaso de
cerveza dentro de un burdel. En ocasiones desea ser un crítico literario y
escribir, esto no pasan de ser aspiraciones que nunca llega a concretar. Estos
conflictos llevan al personaje ubicarse en un mundo lleno de lamentos y vivir
experiencias al límite de la desgracia.
Así
pues, comparto con ustedes el argumento la segunda novela de Ribeyro, publicada
en el año de 1965.
ARGUMENTO
Es
31 de diciembre, Ludo Totem renuncia a su trabajo, un importante estudio de
abogados de la capital, es indemnizado con un importante monto. Al regresar a
su casa su madre le ordena ir a cuidar la casa de su tío Abelardo.
Inmediatamente ludo conviene con sus amigos y hermano hacer una orgia, sin
embargo los planes no salen como esperan. Al día siguiente regresa a su casa en
medio de un almuerzo familiar por año nuevo, encuentra a su tío Gonzalo, con
quien realizan un tour por todos los prostíbulos más conocidos de Lima, en esos
trotes conoce a Estrella, una prostituta.
Entre
los planes de Ludo -estudiante de la Católica- y sus amigos -estudiantes de la UNMSM-
está sacar una revista, mientras se discute entre el contenido, el diseño y el título,
llega el Dr. Rostalínez, profesor con el que ellos tenían amistad. Ludo se
retira de la concentración para ir donde Estrella, no la encuentra una y otra
vez, obsesionado decide regresar en múltiples oportunidades. Un día mientras la
espera, a Ludo le parece escuchar su risa, en ese momento es abordado por un
maleante que se hacía llamar “El loco camioneta” y que era conocido de Estrella,
guía a Ludo a una calle desolada donde termina estropeándolo, ahí se le
ocurriría un nombre para la revista… Prisma.
Ludo
recurre donde el Dr. Rostalínez para proponerle el nombre y pedirle ayuda para encontrar
un trabajo. Rostalínez le recomienda al Dr. Font, quien acepta a Ludo como un trabajador
independiente, pues solo lo ayudaría con la firma en sus escritos. Así, Ludo
emprende una búsqueda desdichada de clientes, llegando a buscarlos hasta en un
matrimonio, donde su propia familia lo desconocía.
Cada
día más agobiado, decide con su mejor amigo Pirulo (Pedro Primrose) abordar el
negocio de venta domiciliaria de insecticidas, pero pronto descubrirán que eso
no es lo suyo.
Sin
mayor ocupación que la vagancia pensativo e indiferente al éxito de sus
ascendientes, su madre lo manda a poner un anuncio de alquiler por los
departamentos desocupados, mientras esperaba un taxi por el centro de Lima es
recogido por Carlos Ravel, un amigo con una suerte diferente, para su sorpresa,
adelante estaba Lisa, la novia de Pirulo. Más tarde llegaría al bar “Ateneo”,
lugar bohemio de escritores y cuentistas donde se celebraban lecturas de
creaciones literarias narradas por sus propios autores. Ludo decide participar,
pero su cuento le parece un fiasco, ahí se encuentra con Segismundo, un viejo
amigo de secundaria que trabajaba en la marina mercante.
Todo
parece cambiar cuando nombran al padre de Pirulo como Prefecto de Ayacucho, Pirulo,
quien tenía un fajo de billetes (quien sabe la razón), comento la noticia a
Ludo. No duraron gastarlo en trago, cigarrillos y mujeres. Invitaron a las
primas de su amiga Olga a un viaje por Chosica, sin embargo, sus objetivos
lujuriosos nunca se cumplieron.
Ludo
sentía que perdía el tiempo, al acudir a una kermese de la iglesia y al salir a
caminar, conoció a una morena con quien desquitaría todos sus placeres, sin
embargo, “Semejante templo era demasiado
solemne para la modestia de su devoción”. Mientras regresaba a su casa fue
detenido por indocumentado.
Después
de la accidentada noche anterior, Ludo despierta y se encuentra con Pirulo en
su cuarto, le cuenta que está con dinero y carro, todo oficial de la prefectura
de Ayacucho, Ludo se viste y sale con Pirulo a conquistar las calles de Lima. Al
poco tiempo se les junta Jimmi, un hombre mal afamado por pedófilo. Ebrios y
sin razón deciden hacer el paso de la muerte –cruzar una avenida transitada sin
detenerse-. Dos terminaron en el hospital, uno muerto. Ese día murió Jimmi, al
salir del hospital y después de su pronta recuperación Ludo y Pirulo lo
visitaron en el cementerio.
Genaro,
cuñado de Ludo propone un negocio a la familia, vender los departamentos en
Alquiler y comprar tres camiones de transporte para así obtener mejores
ganancias. Por estas razones Ludo se muda a un cuarto que su abuela tenía en la
victoria. Se comunica con Segismundo, quien regresó a Lima después de un viaje
con cosas de contrabando que se disponía a vender por todo el país.
Mientras
Ludo lee un periódico, observa un anuncio que promocionaba la próxima salida de
Prisma, Ludo y Pirulo estaban fuera del proyecto. Desde que su Padre era
prefecto, Pirulo todo el tiempo tenía dinero que malgastaba en Lima, todo eso
se terminaría, pues al poco tiempo asesinarían a su pare por presuntos arreglos
en contra de unos comuneros de Ayacucho.
Ludo
se encuentra a Daniel, un amigo que oficiaba como taxista –su prioridad era
hacer abortar a su mujer-. Fueron a un prostíbulo, el negocio era recoger a los
marinos del aeropuerto y llevarlos al cabaret a cambio de 20 soles. Al llegar
al aeropuerto y después de resolver inconvenientes con el taxi, se enteran que los
oficiales ya habían llegado, los buscaron en los bares del puerto, encontraron
a uno que quería regresar al callao, lo embarcaron. Daniel se dispuso a asaltarlo,
con colaboración de Ludo lo dejaron tirado en el camino. La fechoría perpetuada
fue noticia en la ciudad. Ese día Ludo se quedó con tres billetes de 10 dólares
y una fotografía del marino.
Unas
semanas después Ludo recibió una llamada de Estrella, quería verlo. Cuando se encontraron
Estrella advirtió a Ludo que un amigo deseaba hablar con él, era “El loco
camioneta”. El plan del “loco camioneta” era amedrentar a Ludo y extorsionarlo ya que el día del asalto al marino, Estrella vio a Ludo embarcar a uno en el carro de
Daniel, lo que hacía pensar que ellos tenían algo que ver. Ludo negó todo, sin embargo,
“El loco camioneta” lo amenazó con delatarlo a la policía.
Ludo,
estaba turbado. Después de divagar en soluciones, citó al “loco camioneta”, para intentar un arreglo. El encuentro seria en el Campo de Marte.
Aquella noche, al frente del monumento de Jorge Chávez, Ludo saco el revolver que
heredó de su padre y acabo con la vida de “El loco camioneta”, dejando en sus
bolsillos los tres billetes y la fotografía que le había sacado al marino. Después
regreso al cuarto de su abuela, miro el revólver, apoyó su caño en la sien.
Ludo Tótem desaparece, pensó. Su reflejo le pareció ridículo, tiró el revólver sobre
la cama y cogiendo su máquina de afeitar se rasuró el bigote.
Felicitaciones, muy buena reseña 👍
ResponderBorrarGracias Erik. Un abrazo y bendiciones para ti.
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