RBC
televisión transmitía el programa “Vivamos”, conducido por Ricardo Belmont. El
referido programa desarrollaba debates de diferentes temas. En una de sus
ediciones se trató el tema de la “pornografía”. El conocido sexólogo Marco
Aurelio Denegri (MAD), fue parte de ese programa, acompañado por diferentes panelistas
como el obispo del Callao Ricardo Durand y el cineasta Armando Robles Godoy,
entre otros. Mientras escuchaba las opiniones del panel, MAD se mostró
escéptico pues tenía en su maletín armas que destruirían cualquier argumento
sin fundamento. Cuando llegó su turno de hablar, leyó un párrafo del libro Rojo
de Mao Tse-Tung que decía: “Quien no ha
investigado, no tiene derecho a hablar. Aunque esta afirmación mía ha sido
ridiculizada como empirismo estrecho hasta la fecha no me arrepiento de haberla
hecho, al contrario, sigo insistiendo en que sin haber investigado nadie puede
pretender el derecho a hablar. Hay muchos que apenas descienden de la carrosa,
comienzan a vociferar y a lanzar opiniones criticando ello y censurando
aquello, pero de hecho todos aquellos fracasan sin excepción porque sus
comentarios o críticas que no están fundamentados en una investigación
minuciosa, no son más que charlatanería”; inmediatamente leyó un pasaje
bíblico, Eclesiástico Capítulo 18 versículo 19: “Antes de hablar, infórmate”. El respaldo de sus afirmaciones se
encontraba en su ensayo “La Bibliografía
General de la Pornografía”. Después de su intervención y al escuchar
nuevamente la opinión del panel saco un cigarrillo, dejando en claro que todo
lo que tenía que decir ya estaba dicho.
El
pasado 16 de mayo MAD cumplió 80 años. Su mente seguía estando lúcida, su
columna seguía saliendo en El Comercio, sus documentaciones y comentarios seguían
siendo emitidos con un juicio y criterio envidiable, sin embargo, su programa
ya no era transmitido. MAD tenía un problema, su cuerpo envejecía, sus movimientos eran
más lentos y su voz ya no era la misma; todo esto como consecuencia de su
avanzada edad, pero existían cosas que no se podía permitir que a MAD le
sucedan. Lastimosamente, su salud se complicó cuando nuestro país se encontraba
en modo fútbol.
Cuando
se informó que MAD estaba internado en una clínica se inventaron varios
mitos, algunos dándolo como desahuciado, otros que carecía de recursos
económicos, mitos que desde luego fueron desmentidos con el paso de los días. Lo
que no era un mito era la soledad en la que se encontraba.
Carlos
López, amigo de MAD público su teléfono para recibir todo tipo de ayuda destinada
a nuestro polígrafo, sin embargo, el teléfono no sonaba muy a menudo. Lo más
indignante era que ninguna de las autoridades del país se manifestaba al
respecto, ni el Ministerio de Cultura, ni el Ministerio de Educación. En este
punto es necesario dejar en claro que el apoyo y la solidaridad que se reclamaba
no era monetario, sino moral, dándole una distinción, el lugar que realmente se
merece a un intelectual que como pocos, quedaba en nuestro país. Carlos López
cuenta que se comunicó por iniciativa personal con el MINEDU para dar a conocer
el estado de salud de MAD, “¿quién es Marco Aurelio Denegri?”, le habrían
contestado. Parece que hasta ahora el MINEDU no lo conoce, pues ni un tweet han
publicado respecto a su muerte.
El reconocimiento tardío. |
27 de julio, MAD se fue de este mundo. Siempre me imaginé ser entrevistado en su programa en mérito a alguna novela que hubiese publicado. En ese sueño siempre existía un temor y es que al escucharlo hablar rogaba no ser destruido con preguntas cuyas respuestas estén lejos de mis conocimientos, miedo quizás a hacer el ridículo.
Si
alguien quiere saber quién fue MAD y por si le interesa averiguar cuál es “La Función de la Palabra”, en redes hay
bastante material al que pueden recurrir. Entiendan que aquel viejo encorvado,
con lentes gruesos y una variedad de manuscritos sobre una mesa, que nunca
saludaba a una cámara, adornó nuestra literatura y los diarios con su saber e
inteligencia. Aquella persona que consideraba más importante ser docto que ser un
doctor.
Existe
poco sobre su biografía, sin embargo, ante su deceso, reportes periodísticos ya
se acercan más a lo que nunca quiso contar, pues no hablaba de sí mismo,
siempre decía: “La vida de Marco Aurelio
no es importante”. Se consideraba un vehículo de transmisión cultural,
totalmente intolerante a la ignorancia, intolerancia que con el paso del tiempo
se fue disipando al asumir que el mundo y la vida, suelen ser así, resignado a que
el ser humano sea el único responsable de la involución de nuestra sociedad,
lejos de aquella esperanza, pues el que vive de esperanzas muere en ayunas, proverbio
que MAD siempre citaba.
Simplemente
GRACIAS MAD, por ser uno de los responsables de Actualidad en Letras, por ser uno
de los responsables del rincón de la cultura en la televisión, por el material
que heredamos de tus conocimientos. No sabes cuan arrepentido estoy de haberme
dedicado tan poco a escribir, pues de haberlo hecho obstinadamente, hubiese
tenido el privilegio de conocerte.
Al igual que usted mi admiración a MADM un peruano ejemplar. Lo conoci joven aun encel cole en mis busquedas del y que veo ahora, dedesto hace 23 años creo... Gracias por recordarmelo. En adelante te seguiré. Di una ojeda a los títulos de tus publicqciones claro de manera sucinta. Me gustag.
ResponderBorrarSaludos
Graciela Ramos
Muchas gracias Graciela, siempre serás bienvenida en este blog. Un abrazo.
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